Aunque es probable que muchos no lo vean así, Estados Unidos ha recibido el mayor ataqué cibernético de la historia de internet. La filtración de las comunicaciones realizadas por su cuerpo diplomático al sitio Wikileaks es, sin duda, uno de los reveses más grandes que haya podido sufrir alguien hasta ahora en la era digital.
Cerca de 250,000 documentos secretos fueron filtrados hacia el sitio web en mención creado por Julian Assange, y en la que se ha expuesto la labor de sus embajadores que además de sus actividades diplomáticas realizaban tareas de espionaje.
El ataque, al parecer, fue realizado desde adentro. Hasta el momento es Bradley Manning el único acusado como supuesto autor de filtrar los mencionados documentos.
Este hecho afectará no sólo sus relaciones con todos los países, sino que repercutirá en la misma tecnología sobre o a través de la cual se perpetró. Sin lugar a dudas pone en cuestión muchos aspectos sobre el papel de Internet: su control, seguridad, libertad de acceso y uso, y tantos otros que se venían discutiendo actualmente.
Tenemos la sospecha de que Internet será diferente a partir de ahora. Ya los líderes del mundo se están pronunciando en contra de la publicación de dichos documentos, y tal como se están dando las cosas, pronto se tomarán las medidas que, seguramente, no favorecerán a su desarrollo y libre uso.
Cable Gate
New York Times
El País
Titulares
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